Una nueva diana para evitar la metástasis antes de que se manifieste

Un estudio liderado desde el Hospital del Mar Research Institute ha identificado el papel de la proteína TIM-3 durante el inicio de la metástasis.

Catalina Rozalén, primera autora del artículo, y Toni Celià-Vallès, investigador principal.

Detener la metástasis antes de que se inicie. Este es el horizonte ideal para acabar con las metástasis, causantes de más del 90% de las muertes por cáncer. Ahora, un nuevo estudio liderado desde el Hospital del Mar Research Institute ha encontrado lo que podría ser un elemento clave para conseguirlo.

Los equipos investigadores, liderados por Toni Celià-Vallès en el HMRI, han identificado el papel que juega la proteína TIM-3 en las células más agresivas iniciadoras de metástasis, las «semillas» de la metástasis. Estas son las células que escapan del tumor primario para expandirse a otros órganos. El momento de instalarse en el nuevo territorio, cuando todavía son muy pocas células, es el más crítico; por eso atacar a las células en este momento sería una gran oportunidad terapéutica.

Utilizando un modelo de ratón, los y las científicas han demostrado que TIM3 permite a las células tumorales suprimir el sistema inmunitario cuando llegan a los órganos distantes, y así asegurar su supervivencia. El estudio se ha hecho con células de cáncer de mama con metástasis en el hígado.

Los resultados del estudio con ratones parecen compatibles con lo que han encontrado en muestras de una cohorte de pacientes del Hospital del Mar. «Las que tenían tumores con niveles altos de TIM-3 presentaban más riesgo de metástasis y de mal pronóstico«, apunta la Catalina Rozalén, investigadora predictoral y primera autora del artículo.

Ya existen fármacos que bloquean la acción de TIM-3, y potencialmente se podrían utilizar en pacientes de alto riesgo (con altos niveles de TIM-3), para evitar la aparición de nuevos tumores. Pero «todavía falta mucha investigación en ensayos clínicos con el diseño apropiado para llegar a este punto», enfatiza Joan Albanell, también autor del estudio.

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