Los proyectos científicos del genetista Carles Lalueza-Fox suelen estar relacionados con neandertales, como fue el caso de su primer libro, Palabras en el tiempo. Esta vez, en cambio, Lalueza-Fox hace un repaso de la historia de las monarquías europeas a través de las aventuras científicas de su propio laboratorio.
Recientemente ha analizado una calabaza llena de sangre hace más de 200 años, una cabeza momificado, un sarcófago templario e incluso una pierna con nueve potenciales propietarios. Normalmente, esta es la fuente del problema: un único trono para más de un candidato, a los que encima se deben sumar los impostores. Por suerte, las pruebas genéticas que explica Lalueza-Fox permiten descartar los últimos.
«A medida que pasan las páginas es inevitable ir aprendiendo tanto de historia como de genética«
La historia, en este caso la del libro, está llena de humor y anécdotas estrambóticas (por no decir macabras) que hacen la lectura muy amena. Sin embargo, no hay que olvidar que se trata de un libro de divulgación, así que a medida que pasan las páginas es inevitable ir aprendiendo tanto de historia como de genética. De hecho, Lalueza-Fox, del Instituto de Biología Evolutiva (IBE: CSIC-UPF), acaba reivindicando una nueva visión de la historia basada en la genética, la «genohistoria«. Según el autor, las grandes decisiones que tomaron los personajes históricos estaban condicionadas por sus genes. Por lo tanto, la interpretación de los diferentes eventos se podría sumar una nueva óptica, la genética.