El impacto de la pandemia en la salud mental de los profesionales de la salud

Dos estudios dirigidos por investigadores del IMIM muestran un alto porcentaje del riesgo de trastornos mentales entre el personal sanitario español después de la primera oleada de coronavirus.

Los investigadores del IMIM Gemma Vilagut, Jordi Alonso, Philippe Mortier y Víctor Pérez llevaron a cabo este estudio.

Gemma Vilagut, Jordi Alonso, Philippe Mortier i Víctor Pérez han terme aquest estudi.

Investigadores del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM) han dirigido dos estudios, realizados dentro del proyecto MINDCOVID, donde entrevistaron a más de 9000 profesionales de dieciocho hospitales de toda España sobre el impacto personal de COVID-19 en su entorno familiar, social y laboral durante la primera oleada de la pandemia.

«Después de la primera ola, el 14,5% de los trabajadores sanitarios españoles tienen un trastorno mental incapacitante, con claras repercusiones negativas en su vida profesional y social. Se trata de una prevalencia mucho mayor de lo esperado», afirma Jordi Alonso, autor principal del primer estudio.

El colectivo de auxiliares de enfermería es el que mostró un mayor impacto, así como los profesionales expuestos a pacientes COVID-19 (80%), y los que han sufrido la enfermedad (17,4%) o han tenido parientes infectados.

El segundo estudio documenta una prevalencia de ideación suicida activa del 3,5% durante la primera oleada de la pandemia, en comparación con el estimado 0,7-0,9% para la población general antes de la pandemia.

«Esto es preocupante, especialmente dado el ya mayor riesgo de suicidio entre los profesionales sanitarios antes del inicio de la pandemia»

Una serie de simulaciones mostraron que las intervenciones que aumentan la preparación hospitalaria y disminuyen la inseguridad financiera entre los trabajadores de la salud pueden conducir a reducciones en la ideación suicida de hasta el 75%.

Los datos muestran, según los autores, la necesidad de esfuerzos sociales para evitar el contagio y evitar que los sistemas de salud se vean abrumados.

Las personas en riesgo de demencia, también más afectadas

Otro estudio realizado en el IMIM también muestra cómo, durante la etapa de confinamiento, las personas mayores en etapas pre-demencia experimentaron un mayor malestar psicológico general y síntomas de ansiedad y depresión, superando el umbral patológico.

El estudio, dirigido por Rafael de la Torre, monitoreó a dieciséis personas, entre los 60 y los 80 años, participando en el estudio PENSA  sobre la prevención del deterioro cognitivo en etapas previas a la aparición de la demencia.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *