En los últimos años, ha quedado claro que los antibióticos en los que confiamos para tratar las infecciones bacterianas se están volviendo ineficaces.
La resistencia a los antibióticos evoluciona de manera natural con el paso del tiempo como resultado de cambios en los genes bacterianos, que se pueden extender rápidamente a toda la población bacteriana. Este proceso se acelera cuando se hace un uso excesivo de antibióticos o cuando se toman cuando no es adecuado hacerlo (por ejemplo, para tratar infecciones víricas).
La resistencia a los antibióticos se acelera cuando se hace un uso excesivo de éstos o cuando se toman cuando no es adecuado hacerlo.
A nivel mundial, alrededor de 700.000 personas mueren cada año a causa de las infecciones resistentes a los antibióticos y la cifra aumenta rápidamente. Las infecciones resistentes a los antibióticos podrían causar 10 millones de muertes anuales hacia el 2050 – más que el número de muertes por cáncer en todo el mundo.
Hay que tomar medidas urgentes para evitar esta emergencia de salud pública inminente. Con sede en el Parque de Investigación Biomédica de Barcelona (PRBB), el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) lidera la lucha contra la resistencia a los antibióticos. Para obtener más información sobre su iniciativa de resistencia antimicrobiana, hemos hablado con la coordinadora del programa, Clara Ballesté Delpierre.
Alrededor de 700.000 personas mueren cada año a causa de las infecciones resistentes a los antibióticos.
Detectar y tratar patógenos multi-resistentes
Una parte esencial en la lucha antimicrobiana es encontrar nuevos tratamientos eficaces contra los patógenos resistentes a los antibióticos, especialmente las bacterias que han evolucionado resistentes a varios fármacos diferentes (multi-resistentes).
En ISGlobal están explorando todas las vías en la búsqueda de nuevos antibióticos, incluyendo la creación de nuevas moléculas sintéticas en el laboratorio y la búsqueda de antimicrobianos naturales en plantas como las algas. Otro enfoque es encontrar maneras de re-sensibilizar las bacterias resistentes a fármacos ya utilizados.
Los investigadores e investigadoras también están trabajando en un nuevo dispositivo para identificar los tipos exactos de bacterias que están causando una infección y determinar qué medicamentos serán los más efectivos. La prueba reducirá el tiempo que se tarda en identificar el mejor tratamiento de 24 horas a 15 minutos, lo que significa que los pacientes podrán empezar a tomar el antibiótico adecuado mucho más rápidamente. También reduce el riesgo de utilizar antibióticos inapropiados que pueden aumentar las posibilidades de resistencia.
Una nueva prueba que se está desarrollando en ISGlobal reducirá el tiempo que se tarda en identificar el mejor tratamiento antibiótico de 24 horas a sólo 15 minutos.
Atravesando el Valle de la Muerte
Una conferencia recientemente organizada por ISGlobal, Revertir un futuro distópico. Nuevas estrategias para descubrir agentes antibacterianos, puso de manifiesto los últimos logros científicos en la búsqueda de nuevos antibióticos en el laboratorio.
Sin embargo, el evento también enfatizó que simplemente identificar estos nuevos medicamentos no es suficiente: deben hacerse llegar a las personas que los necesitan. Y como muchas de las personas con más riesgo de sufrir infecciones resistentes a los antibióticos viven en zonas pobres del mundo, estos nuevos tratamientos también deben ser asequibles.
«Hasta hace poco, ha sido responsabilidad de las empresas farmacéuticas llevar nuevos medicamentos al mercado«, afirma Clara. «Pero hay muy pocas grandes empresas farmacéuticas que trabajen en desarrollar nuevos antibióticos, porque los rendimientos económicos son inferiores a los obtenidos por desarrollo de medicamentos para otras enfermedades como el cáncer».
En efecto, el camino desde el descubrimiento de un nuevo fármaco hasta que éste llega al mercado está lleno de dificultades, y cualquier nuevo medicamento tiene que navegar por un costoso viaje a través de ensayos clínicos y regulaciones legales. Así pues, hay pocos estímulos para las empresas para desarrollar antibióticos cuando es poco probable que recuperen esta inversión.
Como resultado, muchos nuevos antibióticos caen en el llamado «valle de la muerte» entre el laboratorio de investigación y los estantes de la farmacia.
Organismos públicos como la Comisión Europea financian programas aceleradores que tienen por objetivo eliminar esta brecha y aportar nuevos antibióticos en el mercado. Pero, según Clara, ya es hora de que las empresas también afronten el reto.
«Ya es hora de que las empresas farmacéuticas afronten el reto de desarrollar nuevos antibióticos y llevarlos allí donde se necesiten»
Clara Ballesté (ISGlobal)
«Tenemos que crear nuevas asociaciones público-privadas para ayudar a los nuevos antibióticos a llegar a la práctica clínica, donde puedan salvar vidas», argumenta.
Jugando bien las cartas
«En ISGlobal, no nos podemos centrar sólo en nuestra investigación. También necesitamos impulsar el cambio en otras áreas«, explica Clara. «Las personas van al médico cuando están enfermas y presionan para que les receten antibióticos porque piensan que los mejorará, pero a menudo no es así. El público debe ser consciente de que los antibióticos no son útiles para todo«.
Para sensibilizar sobre la resistencia a los antibióticos y cómo funcionan, ISGlobal ha desarrollado un simple juego de cartas llamado Micro-Combat. Los jugadores deben colaborar para prevenir o tratar diversas infecciones desagradables que podrían llegar a hacerse resistentes a los antibióticos.
ISGlobal ha desarrollado un sencillo juego de cartas llamado Micro-Combat para sensibilizar sobre la resistencia a los antibióticos.
El juego ganó un premio a la mejor iniciativa dirigida a sensibilizar sobre la resistencia a los antimicrobianos y ya está disponible para cualquier persona que pueda comprar en línea.
Un enfoque integral en la lucha contra la resistencia antimicrobiana
Necesitamos urgentemente antibióticos nuevos y eficaces, que deben utilizarse con cuidado para que no se produzca resistencia. Y, por supuesto, debemos asegurarnos de que estos nuevos medicamentos lleguen a las personas que más los necesitan, a un precio que pueden pagar.
El éxito en la batalla contra la resistencia antimicrobiana dependerá de una combinación de investigación científica, divulgación y concienciación de la sociedad, colaboraciones público-privadas y desarrollo de nuevas políticas de salud pública.
Combinando todos estos aspectos en un enfoque unitario e integral, la Iniciativa de Resistencia Antibiótica de ISGlobal está jugando un papel fundamental en el esfuerzo global para lograr un futuro libre del miedo a las infecciones resistentes a los antibióticos.
