La leucemia linfoblástica aguda de células T es una enfermedad rara, que se diagnostica a un centenar de personas cada año en España, y afecta sobre todo a la infancia. Algunos pacientes no responden bien a la habitual quimioterapia. Gracias a un estudio encabezado por investigadoras del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), ahora no sólo se podrá saber con antelación qué personas tienen mayor probabilidad de no responder a la quimioterapia, sino que se también podría eliminar la resistencia a este tratamiento.
De hecho el trabajo, realizado por el Grupo de Investigación en Células Madre dirigido por Anna Bigas, ha demostrado, en un modelo de ratón, que combinar la quimioterapia con un inhibidor de la proteína beta-catenina puede eliminar la resistencia al tratamiento. Los autores creen que esta combinación también podría mejorar todavía más la respuesta en los casos en que el tratamiento ya funciona.
Utilizando tanto muestras de pacientes como modelos animales, el equipo ha confirmado el papel de la beta-catenina en la formación de la leucemia, a través de su acción sobre 79 genes. «Ahora estamos mirando cuáles de estos genes son más informativos y podrían orientar el diagnóstico de la respuesta de los pacientes a la quimioterapia convencional», dice Bigas, que es también vicedirectora de Investigación Preclínica del Instituto de Investigación Contra la Leucemia Josep Carreras.
Los próximos pasos serán realizar estudios con células de pacientes humanos en ratón y, en caso de resultados positivos, poner en marcha un ensayo clínico en humanos.
Violeta García Hernández et al. β-catenin activity induces an RNA biosynthesis program promoting therapy resistance in T Acute Lymphoblastic Leukemia. EMBO Mol Med (2023)e16554 https://doi.org/10.15252/emmm.202216554