A partir del trabajo del artista canadiense François Brunelle que consistió en fotografiar personas prácticamente idénticas, investigadores del Instituto de Biología Evolutiva (IBE: CSIC-UPF) y del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras han determinado que los parecidos físicos tienen detrás un parecido genético.
Para realizar este estudio, sometieron a las personas retratadas por François a programas de reconocimiento facial que detectó aquellas que eran casi indistinguibles entre ellas. Posteriormente, y después de descartar que hubiera parentesco entre ellas, se analizó su genoma, su epigenoma y su microbioma.
“La aparición de “dobles” de una persona nunca se había explorado desde la genómica, y tiene todo el sentido del mundo hacerlo porque lo externo es un reflejo del genoma y su expresión”
Carles Lalueza-Fox, IBE
Los resultados mostraron que el ADN de los “dobles” estudiados compartían las mismas variaciones genéticas, sobre todo en cuanto a la formación de la frente, los ojos, la nariz y la boca. De forma más inesperada, también se hallaron similitudes en los genes del comportamiento. En cuanto al epigenoma y el microbioma, según este estudio sólo contribuyen ligeramente a las semejanzas humanas.
El presente trabajo asienta las bases para realizar el diagnóstico de enfermedades a partir de la forma de la cara y el análisis de la imagen. E incluso “podría permitir reconstruir la cara de una persona desconocida a partir de una muestra de ADN”, añade Manel Esteller, investigador del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras.
Joshi RS, Rigau M, García Prieto CA, Castro Moura M, Piñeyro D, Moran S, Davalos V, Carrión P, Ferrando Bernal M, Olalde I, Lalueza-Fox C, Navarro A, Fernández-Tena C, Aspandi D, Sukno FM, Binefa X, Valencia A, Esteller. M. Human look-alike identified by facial recognition algorithms show genetic similarities. Cell Reports. Doi: 10.1016/j.celrep.2022.111257, 2022.