Cuando preguntas a una persona que se dedica a la investigación biomédica porque le gusta su trabajo, hay respuestas que se repiten. La satisfacción de poder responder las preguntas que te planteas, la pasión por un trabajo trepidante o la voluntad de encontrar algo, por pequeño que sea, que pueda mejorar la vida de la gente, suelen ser respuestas recurrentes. Pero persiguiendo esta voluntad de ayudar a la sociedad, la investigación ha dejado de lado otros aspectos.
Los laboratorios de investigación consumen mucha energía. Centrífugas, campanas de extracción de gases, congeladores y ultracongeladores (los mal nombrados -80ºC), son «habitantes» de la mayoría de laboratorios. Y también son los aparatos que más gastan.
Por otra parte, los laboratorios son ambientes altamente «plastificados». Los tubos, las placas o las puntas que hace años eran de vidrio ahora son de plástico. Un material barato y resistente pero que en la mayoría de casos es de un solo uso. Y, con la máxima de preservar la esterilidad, la mayoría de estos elementos están empaquetados individualmente.
Por eso, en todo el mundo han surgido iniciativas para intentar tener laboratorios de investigación más sostenibles.
Hoy, con motivo del día de los residuos de laboratorio (lab waste en inglés) que se celebra anualmente el tercer martes de septiembre, queremos recoger algunos de los consejos que comparten los más expertos en el tema.
Todo lo que entra también deberá salir
Todos los materiales que se compran para hacer experimentos deberán ser desechados después de su uso. Pero no todo lo que tenemos dentro del laboratorio es biopeligroso y, a menudo, nos encontramos con envases exagerados. ¿Qué personal de laboratorio no se ha encontrado nunca en una situación así?
Algunos consejos para reducir y gestionar mejor los residuos que salen del laboratorio:
- Si es posible, evita utilizar elementos desechables. Todo lo que puedas hazlo con utensilios de vidrio o plástico reutilizable.
- Reutiliza y rellena las cajas de puntas.
- Recicla todo lo que puedas. No todo lo que hay dentro del laboratorio es biopeligroso. Tienes diferentes contenedores a tu alcance.
- Siempre que puedas, y lo necesites, compra paquetes grandes. Así optimizas el embalaje. Si tú compras poco, júntate con otros laboratorios que compren el mismo producto.
- Pide opciones más sostenibles a tus proveedoras: otros materiales, recogida de embalajes o paquetes más pequeños.
Controlar la temperatura
Mantener las muestras a -80ºC consume mucha energía. Una comparativa sencilla es que, al final del año, un ultracongelador emite el mismo CO2 que todo una vivienda. Por eso ha surgido un nuevo movimiento a favor de subir la temperatura de los ultracongeladores. Y es que, subiendo 10ºC la temperatura podemos llegar a ahorrar hasta una cuarta parte de la energía que consume el congelador.
- Valora si puedes subir la temperatura de los ultracongeladores de -80ºC a -70ºC.
- Si no, haz planos para identificar bien dónde están las muestras y minimizar el tiempo que la puerta está abierta.
- Si ves que hay hielo en la puerta, ¡límpialo! Una limpieza regular del congelador ayuda a que la máquina enfríe mejor y evita un gasto de energía extraordinario.
- Valora bien donde almacenar las muestras. No es necesario guardarlo todo en el ultracongelador.
Los 63 ultracongeladores del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM) están a -75ºC y, los ultracongeladores de emergencia, los mantienen a -60ºC. Así ahorran energía y alargan la vida de los aparatos.
El Parque de Investigación Biomédica de Barcelona (PRBB) ha modificado el circuito de frío del edificio, lo que ha supuesto un ahorro de 170.000 Kwats, o lo que es lo mismo, un 10% de la energía que se consumía en refrigeración.
Optimiza la energía
A pesar de que los congeladores se llevan buena parte del consumo energético del laboratorio, no son los únicos aparatos que gastan. Para optimizar el consumo energético:
- No dejes campanas extractoras en marcha cuando no es necesario.
- Apaga la centrífuga. No es necesario que esté en ‘stand by’ constantemente.
- Apaga los baños o bloques térmicos cuando no los necesites.
- Evita dejar la PCR en funcionamiento toda la noche. ¡Quizás algún compañero o compañera te la puede quitar!
- Pon el autoclave o lavavajillas sólo cuando estén llenos. Así también optimizarás el consumo de agua.
El PRBB está cambiando todas las bombillas de los pasillos por LEDs. Este cambio ya se ha hecho en el estabulario donde se han sustituido 660 bombillas fluorescentes.
Además, el parque instalará placas solares en la cubierta para producir parte de la energía que consume.
Tú puedes ser el motor del cambio
Cada vez son más las instituciones de investigación que cuentan con una persona que se encargue de velar por la sostenibilidad. Y es que, a menudo las medidas que se han planteado no se pueden tomar individualmente, aunque hay acciones que puede hacer cada uno para tener laboratorios más sostenibles, además de seguir los consejos de los apartados anteriores. Por ejemplo:
- La pandemia ya nos ha demostrado que nos podemos encontrar de muchas maneras. Así que opta por las conferencias virtuales siempre que sea posible.
- Infórmate, experimenta, comparte tus inquietudes y organízate para trabajar en grupo.
¿Muchas cosas a tener en cuenta? ¡Quizás sí! ¡Pero todo es más fácil cuando tienes una lista!
Agradecimientos: Marta Rodríguez Martínez
Fuentes: Green Labs Austria, Freezer challenge, Lab concious, Laboratory efficiency action network, London’s Global University, My green lab.