Para el correcto funcionamiento de nuestras células, necesitamos enzimas. Las Poli ADP ribosa polimerasas (PARP) forman una familia de enzimas involucradas en algunos procesos celulares tales como la reparación del ADN. Debido a que esta familia de enzimas lleva a cabo funciones clave en la división celular, científicos y científicas han diseñado inhibidores PARP, considerados un tratamiento potencial contra el cáncer.
Recientemente, personal investigador del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM) ha demostrado que el déficit específico de PARP-1 o PARP-2 — miembros de la familia PARP — en linfocitos T permite una mejor respuesta antitumoral. Por otro lado, también han visto una peor respuesta antitumoral cuando se da un doble déficit de PARP-1 y PARP-2 en linfocitos T.
«Actualmente, todos los fármacos inhibidores de PARP disponibles actúan de la misma manera ante las dos proteínas, PARP-1 y PARP-2, pero nuestros resultados indican que sería muy importante desarrollar fármacos más selectivos que inhiban de manera específica cada una de ellas, para así conseguir una mejor respuesta contra el tumor», concluye José Yélamos, coordinador de grupo en el IMIM y líder del estudio.
Moreno-Lama L, Galindo-Camps MA, Martínez C, Comerma L, Vazquez I, Vernet-Tomas M, Ampurdanés C, Lutfi N, Martin-Cavaller J, Dantzer F, Quintela-Fandino M, Ali SO, Jimeno J, Yélamos J. Coordinated signals from PARP-1 and PARP-2 are required to Establish a Proper T cell immune response to breast Tumors in mice. Oncogene. 2020 Jan 30. doi: 10.1038 / s41388-020-1175-x. [Epub ahead of print]