Las leyes de la evolución afectan también a las competiciones deportivas: nacen, algunas se reproducen y evolucionan y otras se extinguen. Este último no es en absoluto el caso del torneo de voleibol playa del Parque de Investigación Biomédica de Barcelona (PRBB).
El próximo 9 de marzo se abre la pre-inscripción para la 19ª edición del Campeonato de Voleibol Playa del PRBB, que este año tendrá lugar del 30 de marzo al 24 de julio. Un campeonato que nació en 2002 — antes que el propio PRBB en mayo de 2006 — y que ha evolucionado constantemente desde entonces.
Hablamos con tres personas que representan los inicios, el presente, y el futuro del campeonato.
El 9 de marzo se abre la preinscripción para la 19ª edición del Campeonato de Voleibol Playa del PRBB
INICIOS: Jordi Minguillón
¿Puedes hacer un repaso rápido de la cronología del campeonato?
El primer campeonato lo organizó Magano, del laboratorio de Genética del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud, Universidad Pompeu Fabra (DCEXS-UPF), en 2002 y cuando él se fue en 2003, tomamos el relevo los miembros del grupo de inmunología de la UPF. En la primera edición, muy informal, fuimos 5 equipos de 6×6. A partir de 2004, pusimos normas más estrictas y creamos una liga regular y unos play-offs, y durante las siguientes ediciones fue creciendo el número de participantes hasta que en 2008 terminamos con 32 equipos en 4 ligas de 6×6 y 4×4 (los «cracks», «casi-cracks», «casi-que-no» y «disaster») y 4 play-offs.
Al principio éramos sólo gente de la UPF y el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), pero con el traslado de los grupos de investigación al edificio PRBB en 2007, se abrió el campeonato a personas de todos los centros del parque. Además de cuantitativo, quisiera destacar el salto cualitativo del campeonato cuando nos trasladamos al PRBB: la dirección del parque decidió apoyarnos aportando recursos y montando la bien conocida fiesta final en la plaza interior. Sin este apoyo no se entendería el torneo tal como es actualmente.
¿Cuál ha sido tu rol en el campeonato durante estos años?
Del 2003 al 2006 coordiné el campeonato, con gran ayuda de Alberto Moldón (ex-UPF), Mari Carmen Ortells (ex-UPF) y Vanessa Marfil (ex-IMIM). Desde 2008, cuando leí la tesis y me fui del PRBB, ya no estoy directamente involucrado en la organización. Pero seguí jugando hasta 2017, cuando lo hice en tres equipos (2×2, 4×4 y 6×6), ¡y me consta que no soy el único! Desde entonces no he podido jugar debido a una lesión.
Cuéntanos qué te hace sentir el campeonato.
Para mí, hacer la tesis en la UPF/PRBB no se podría entender sin el campeonato de voleibol. Para los que nos hemos formado aquí y que nos gusta la investigación y el deporte, el torneo de ha sido una de las mejores cosas que nos ha podido pasar. Hay que tener en cuenta que ser pre-doc o post-doc es un trabajo muy exigente, así que el torneo ha sido una de las mejores maneras de liberar estrés y mantenernos motivados.
Respecto la parte social, no ha habido mejor forma de conocer a toda la gente del PRBB: de técnicos a jefes de grupo de los diferentes centros, ¡todos nos encontramos en la arena! ¡Incluso conozco varias parejas creadas por «el amor al voleibol»! Al final, ganes o pierdas, juegues o veas jugar, lo que queda es un vínculo entre los que estamos allí y con la institución, una sensación que yo elevaría a la calidad de privilegio.
«Ser pre-doc o post-doc es un trabajo muy exigente; el torneo de voleibol playa del PRBB ha sido una de las mejores formas de liberar estrés y mantenernos motivados»
Jordi Minguillón
PRESENTE: Anna Almor
¿Cuándo empezaste a trabajar en el PRBB? ¿Y a involucrarte en el campeonato?
En 2009 empecé a trabajar como técnico de laboratorio en la UPF, en el edificio docente, y enseguida hicimos un equipo para jugar a la edición del año 2010. Hacia 2014 estaba trabajando como técnico de genotipado en la Unidad de Inmunología de la UPF, donde había mucha afición por el voleibol; que es donde hicieron la tesis Jordi Minguillón, Mari Carmen Ortells y Giulia Lunazzi, los tres ex-miembros de La ORG. Cuando entré yo, en La ORG estaban Romilde Manzoni, Jürgen Mayer, David Piedra, Francesc Leiva y Mariana Lopez (o como le llamaba yo, Mariana «Power»). ¡Ella me enseñó todo!
¿Qué implica ser miembro de la ORG?
Nos repartimos las tareas según las habilidades de cada uno. Pero 2016 fue un año duro: me quedé prácticamente sola. Uno de mis mejores amigos se ofreció a darme una mano, y pobre, ¡no sabía dónde se metía! Hizo un sitio web nuevo e incorporamos mejoras como los cálculos automáticos de la clasificación, disponibilidad de redes según el calendario, etc.
¿Qué otras mejoras habéis incorporado al campeonato?
A petición popular, creamos una nueva categoría 2×2 gracias a Angela Ramirez y Valerio Di Carlo. Otras mejoras fueron crear más premios especiales de votación popular, un concurso en redes sociales organizado por Marc Talló, contar con un árbitro en todas las finales, el mítico photocall de la fiesta, un control exhaustivo y sistematizado del material, modificaciones a la normativa… ¡Y sanciones para los equipos infractores!
¿Qué significa para ti el torneo de voleibol del PRBB?
El torneo del PRBB me ha dado mucho: me ha permitido descubrir un deporte genial y conocer a mucha gente, que no hubiera conocido nunca sin el torneo, con quien compartimos el amor por este deporte y por la ciencia.
También he mejorado mucho mis habilidades políticas (lidiar con equipos enfrentados, personas que se saltan las reglas, etc.) y de organización: no es fácil programar un torneo con más de 400 partidos por temporada, ¡desde las pre-inscripciones al febrero hasta la fiesta final en julio!
Dejo la ORG con mucha pena, pero la gente que se queda son fabulosos. Seguiré colaborando como consultora externa como hizo Mariana cuando se fue, ¡y lo haré muy a gusto!
«El torneo del PRBB me ha aportado mucho: me ha permitido descubrir un deporte genial y conocer mucha gente, así como mejorar mis habilidades políticas y de organización»
Anna Almor
FUTURO: Davide Cutuli
Acabas de debutar en el PRBB y el torneo.
¡Exacto! Soy italiano, tengo 25 años y aterricé en el PRBB en enero del 2019 para hacer las prácticas de mi máster en el grupo del Francesc Calafell, en el IBE, durante 6 meses. Cuando llegué, mis compañeros de laboratorio me dijeron si quería unirme a su equipo de la categoría 6×6 y acepté enseguida. En Italia he jugado a voleibol desde que tenía 14 años.
¿Y qué opinas después de jugar el torneo entero?
Pienso que es una manera ideal de socializar y conocer gente. He conocido un montón de personas gracias a participar en el torneo, y, además, en un ambiente con tanta movilidad como la ciencia, donde constantemente haya gente nueva en el edificio, es una forma ideal de entrar a formar parte de la comunidad del PRBB. El ambiente en la playa es muy relajado e incluso cuando va subiendo el nivel y la tensión de los partidos, ¡la gente se mantiene mayoritariamente amigable y con buena actitud!
«El torneo es una manera ideal de socializar y conocer gente, sobre todo en un ambiente con tanta movilidad como la ciencia, donde constantemente hay gente nueva en el edificio. Es una forma fantásticas de entrar a formar parte de la comunidad del PRBB»
Davide Cutuli
¿Te gustaría volver a participar?
Si vuelvo a trabajar en Barcelona, que está totalmente dentro de mis planes, seguro que sí. Ahora mismo estoy terminando el máster en Italia, y mantengo la amistad con bastantes personas del PRBB que he conocido jugando en la playa.
Pienso que sería fantástico que el PRBB siga destinando recursos al campeonato, sobre todo, teniendo en cuenta el elevado número de participantes que tiene. Es una herramienta increíble que ayuda a crear lazos de equipo (tanto deportivos como de trabajo) y contribuye muchísimo a generar un ambiente de trabajo positivo.